La corrida de Alcurrucén era la TORISTA de la feria según
la empresa, la que sustituía a la corrida concurso por la cual entró la empresa
saliente a manejar la plaza de Huesca.
Sigue todo como el reloj de la plaza, esta feria va a hacer
mucho daño en nuestra ciudad. Quien levanta esto ahora, después del varapalo
que se esta llevando el oscense que no es un gran aficionado pero que paga un
dineral para ir con su mujer y divertirse en nuestra plaza. Porque eso ha sido
Huesca siempre, una plaza en la que nos gustaba divertirnos sin exigir el gran
toro. A ese hombre que sale de la plaza cabreado, mosqueado, asqueado, como lo
vamos a recuperar para que vuelva a los toros. Como dijo mi compañero de
localidad, “mas me hubiera valido ir a ver entrenar al Huesca”. Eso es un gran
problema que nos queda a la afición oscense, porque a los empresarios salientes
les importa un carajo. Sálvese quien pueda, total me voy a ir, pues sacando
tajada. Y nos quejamos de los antitaurinos.
No me extraña que al final del festejo un aficionado
solicitara una hoja de reclamaciones.
Casi media plaza.
Sr. Zorita de blanco y verde, y el Sr. Polo de cuadros
rojos.
Toros de Alcurrucén y Lozano Hermanos, desigual de presentación.
Mansos, descastados, sin fijeza. Cuarto toro inválido de libro.
Primer detalle que no me encaja, nadie de la familia Lozano
viene a ver la corrida, que raro, que una familia ganadera importante no quiera
ver el comportamiento de su corrida. Tal vez tenían claro lo que podía pasar. A
los ganaderos les vino de perlas Huesca porque varios de los toros de ayer no
los puede presentar en ninguna plaza de nuestro país. Vamos que para quitar
restos de fábrica le vino al pelo. Ya estamos en segundas rebajas.
Javier Castaño, hoy le da la alternativa a su hermano Damián
en Gijón. En su primero su buena cuadrilla dio 4000 capotazos. Se rajó en la
muleta como todos y solo pudo pegar dos redondos por la espalda. Estocada que
hace guardia. Su segundo inválido, al presidente le gustó. Buen puyazo de
Sandoval, en todo lo alto.
David Mora, torero clásico en la plaza, poco pudo hacer, en su primero se
arrima al marmolillo, pincha. En su segundo siempre con la cara alta le logra
sacar tres naturales robados en el sol.
Luque, una media de manos bajas para dejar el toro al
caballo y poco más. Por momentos amontonado delante de la cara.
Esta claro que todo se contagia, y en el tendido la gente se
sienta con el pensamiento de ver que nos traen hoy, ayer los matadores se
dejaron llevar por esa negatividad. Falto algo de entrega por los tres, somos
una plaza agradecida. Deberían haber atacado. Más ganas, más disposición no
hubiera venido nada mal.
Parte desde el sol:
LUIS ARAGONES sigue vendiendo sus latas, ayer fue ovacionado
con el himno nacional.
La ovación de la tarde se lo llevo la niña paseante del
sombrero cordobés y el clavel.
Siempre existe algún desgraciado, como en todos lados, esta
vez estaba por la zona de la
Zoiti y cuando entraba
a matar Mora al quinto de la tarde le grito asesino, se tapó enseguida ante la
mirada del personal, pero las peñas deberían habérselo reprochado.
Dejar claro que las peñas se enteran de todo y más de lo que
a algunos les parece, la canción TENGO UNA VACA LECHERA sonó tras el cuarto
toro inválido y no fue casualidad. Como tampoco es casualidad el lanzamiento de
latas una vez muerto dicho toro. Al final del festejo los únicos reproches que
se oyeron por el espectáculo salieron de las peñas. También en el tendido uno
se oyeron reproches, todo hay que decirlo. De momento estos reproches se quedan
cortos para la voltereta que nos están dando todos los días.
Que tengamos suerte hoy. La vamos a necesitar.
Fotografía: Diario del Altoaragón
Segun me comenta un pajarito los toros fueron comprados en un saldo de rebajas pagando dos por uno.
ResponderEliminarLos pajaritos dicen muchas cosas y de vez en cuando hasta aciertan. La verdad que toda la feria ha olido a chamusquina, seguro que dentro de un tiempo nos enteramos de cosas a toro pasado, en frio. entonces entenderemos como han querido morir matando.
ResponderEliminarEsperemos que nos devuelvan la ilusión los próximos empresarios.