CUARTA DE LA FERIA DEL PILAR

Llevaba varios días intentando convencerme a mi mismo de que esta corrida iba a dejar cosas buenas en la feria. A mas de uno le dije que tenia mucha confianza en Juan Del Álamo.

Del Álamo corto una oreja, pero no me gustó. La verdad que no fue una oreja con fuerza.

Corrida de Martelilla con leña para todo el invierno, uno de los troncos mas recios se lo llevo el alguacilillo (pitón partido del primero de la tarde, se partió por la misma cepa, no se porque se lo penso el presidente para devolverlo). Simulacro en el tercio de varas. El tercero de seis años el mas potable. El quinto venia de la Camarga, feo, descarado, destartalado, mal hecho vamos.

Detalles de la tarde.
Muy poca gente con un  calor que no es normal y que dicen que se acaba.
Me encantó ver a la policía llamando la atención al gracioso pesado y mal educado que estaba en la grada del 4, a partir de ese momento nos dejó tranquilos.
Sale el segundo de la tarde y llega Manolo Jimenez (entrenador del Zaragoza) acompañado de Sergio propietario  de la  Taberna Martín, gran expectación, ni que fuera Rafael de Paula.
Dos chicuelinas al paso muy ajustadas de Del Álamo para llevar al toro al caballo.
Un Red Bull se había tomado el salmantino que estuvo muy acelerado y atacado desde el principio, está bien atacar pero el toreo es despacio y por abajo.  Con la derecha torea bien pero con la izquierda no supo perderle pasos, se tiró a matar de verdad.
Joselito Ballesteros, banderillero de Nazare se llevó la ovación de la tarde por su rápido quite a su matador que tropezó delante de la cara del cuarto toro en el recibo capotero.
En el tendido 2 el matador Morenito de Aranda, con Zorita y Polo uno a cada lado aunque ya no tienen nada que ver.
El Ruso, banderillero de Parejo, se toma al dedillo lo de coger el capote con orejas, a lo Bugs Bunny exagerado, que horror.

Foto: A.Barrios

Nazare se llevo el peor lote aunque se justificó (dos arrimones a dos marmolillos), Julio Parejo ni se justificó ni sabia donde estaba creo yo. Salia de la cara del toro sin rematar y mirando al tendido dando voces (Vamos allaaa...) todas las tandas incluso cuando lo desarmaron como si estuviera en una portátil 

Salvó la tarde la conversación después de la corrida.